Los bancos europeos financian el comercio de petróleo desde la Amazonía a EE. UU.

¿Cómo explicar las razones por las que un banco que cuenta con políticas para promover los derechos humanos, la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático financie el flujo de petróleo desde la región de las Cuencas Sagradas del Amazonas en Ecuador a las refinerías de Estados Unidos? Te preguntas si tal vez se trata de hipocresía? El informe liderado por el Centro de Investigación de Stand.earth, en asociación con Amazon Watch, revela algunos hallazgos serios y pioneros en este campo…
El informe evalúa 19 bancos que financian el comercio de petróleo crudo proveniente de la Amazonía occidental entre 2009 y 2020. Irónicamente, los seis bancos que más contribuyen al comercio de petróleo crudo cuentan con políticas y compromisos para la protección de los derechos humanos, la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático.
Las Cuencas Sagradas del Amazonas abarcan una superficie aproximada de 30 millones de hectáreas (74 millones de acres) en Ecuador y Perú. Esta área alberga aproximadamente a 500.000 indígenas de más de 20 nacionalidades. Es la región con mayor biodiversidad en la Cuenca Amazónica y está amenazada por la expansión de la extracción petrolera, la minería y otras industrias extractivistas.
El último derrame registrado en Ecuador ejemplifica claramente las razones por las que debe detenerse la extracción del petróleo en la Amazonía. Es el peor derrame en 15 años, ha contaminado cientos de kilómetros de varios ríos, ha impactado la vida de más de 120.000 personas entre las que se incluyen 27,000 indigenas y, es parte de un legado tóxico continuo que deja la producción petrolera en Ecuador.